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Por estos días, los estudiantes universitarios preparan los exámenes finales con grandes ojeras y crisis de ansiedad, como contaba hoy en TV una chica. Esto me ha hecho recordar que, hace años, una vecina me comentaba orgullosa lo responsable que era su hijo, que se quedaba estudiando todas las noches. Me interesé entonces por su horario y la madre me contó que por las noches salía unas horas con los amigos “para airearse” volviendo a la 1, hora a la que comenzaba a estudiar con la ayuda de los dos termos de café que ella le dejaba preparados. A las 7 se acostaba y dormía hasta las 2 de la tarde cuando se levantaba para almorzar.
Con una simple cuenta con los dedos pude ver que estudiaba 6 horas y dormía 7 y me quedé preguntándome por qué no lo haría al contrario –dormir de noche y estudiar de día- y así sacaría una hora más de estudio sin maltratar su sistema nervioso con tanto café, ni alterar el ritmo de sueño. Y, de camino, su madre no tendría que preparar cafeteras ni levantarse a media noche para ver si se había dormido, cosa que al parecer ocurría con frecuencia.
Ahora, los estudiantes han tomado la costumbre de estudiar en bibliotecas universitarias que abren día y noche en esta época, por lo que también me pregunto que sentido tiene eso. Lo entiendo cuando un estudiante no tiene una habitación tranquila con un ordenador o similar a mano, pero en este caso ¿para que? Me lo expliquen, por favor, los que tienen sus estudios más recientes.
Mi hija cuando hacía oposiciones, estudiaba en una biblioteca, en casa tenía su habitación con un pupitre enorme, entonces no había ordenadores.
ResponderEliminarNos decía que en la biblioteca había ambiente de estudio, no se podía hablar con nadie, y no se levantaba uno constantemente a beber un vaso de agua, al servicio, a picotear algo de la nevera o simplemente a darse una vuelta por casa o mirar por la ventana.
Buen finde, que yo me iré a meditar (trabajar) a sitio más fresco.
Quizá porque yo me distraigo con una mosca , siempre he pensado que estudiando en público hay más distracciones que en tu habitación. Se puede ser riguroso con los movimientos por la casa, pero no con los de los vecinos de puesto en la biblioteca, con el que entra, el que sale, la que se coge la coleta, el que se rasca la coronilla...
EliminarYo cuando estudiaba los finales de la carrera lo hacía en casa, de 8 de la mañana a 2 de la tarde (recreo a las 12) y después de 4 de la tarde a a 8 de la noche (recreo a las 6) y de 9 de la noche a 1o 2. Dormía 6 o 7 horas de noche y estudiaba muchas, muchas horas.
ResponderEliminarCreo que lo mejor es dormir de noche, pero cada uno tiene que buscar su método.
Mi experiencia es que los buenos estudiantes estudian de día, pero, como es lógico, eso tendrá sus excepciones y cada cual buscará su método, pero lo que yo temo es que esos métodos estén influenciados por la corriente en los jóvenes de hacerlo todo de noche y no por le efectividad del estudio a esas horas.
EliminarLo de los centros de estudio debe de ser algo bueno para los estudiantes porque aquí hay muchos y están a tope y cuando llegan las épocas de exámenes amplían mas los horarios de apertura. Dicen que muchos estudian allí porque sus casas son pequeñas y no pueden disponer de un sitio silencioso en donde poder estudiar pues televisiones, radios y voces les desconcentran mientras que enl os centros de estudio todo es silencio.
ResponderEliminarLo de estudiar de noche nunca la entendí pues yo nunca fui capaz de hacerlo siempre preferí levantarme temprano para estar descansada y con la cabeza despejada, pero supongo que cada uno tendrá que buscar el mejor horario para si.
Aquí las bibliotecas universitarias, en esta época, creo que solo cierran una hora por la mañana para limpiar y creo que en los casos que tú citas están indicadas, pero sigo sin entender la razón del horario, por qué de noche y no de día, ya que esos ruidos en sus casas también se supone que les impedirán dormir.
EliminarDe todas formas, en este asunto partimos de la base de que en España los estudiantes son casi todos a tiempo completo, no compaginan los estudios con un trabajo, como se suele hacer en otros países. Trabajos en el propio campus o fuera de él, pero que no les permiten pasarse la mañana durmiendo.
Mi ejemplo no es muy válido, pero siempre usé la noche para dormir y el día para estudiar o trabajar desde las primeras horas del día. Tengo un hijo, ingeniero de telecomunicaciones, que jamás tomó café, que nunca se acostaba después de las doce de la noche estudiando, pero que trabajaba desde l primer día de curso siempre al mismo ritmo: acabó la carrera en cinco años, en junio. Es cierto que mi hijo tiene buenas facultades intelectuales, pero lo unió al esfuerzo continuado y le dio un fruto extraordinario. No lo digo para presumir de nada, sino como ejemplo de que otra forma de hacer las cosas es posible. Justifico lo de las bibliotecas porque disponen de todo el material que no suelen tener en casa.
ResponderEliminarBesos.
Yo no he podido tampoco quedarme nunca de noche, pues aunque fuera solo un par de horas, ya se me iba el sueño y me costaba la noche entera, por lo que prefería poner el despertador temprano y así dormía lo razonable. Que nunca era mucho, pues soy poco dormilona. Además, como mis estudios más serios han sido tardíos, no me he podido permitir dormir durante la mañana.
EliminarEl ejemplo de tu hijo es semejante a otros que conozco y por ello digo que mi experiencia es que los buenos estudiantes estudian de día y de forma regular, sin esos atracones de última hora y sin llegar al examen con los nervios desatados. Creo que esto es algo que deberían inculcar en las propias clases desde el primer año de la carrera.
Hay otra cuestión importante. A la edad en que se realizan estudios universitarios, los jóvenes comienzan a sentir la necesidad de independizarse, de estar solos. Una forma económica de lograr esto cuando no se dispone de la posibilidad de compra o renta de un departamento es oponer los horarios con el resto de la gente que los rodea.
ResponderEliminarPrrobablemente tienes razón y en eso influya que las viviendas son ahora más pequeñas que antes. De todas formas, tampoco encaja del todo, ya que ese comportamiento se da también entre los jóvenes independizados al estudiar fuera de donde vive su familia, que en Granada son un porcentaje muy alto entre los alumnos de la UGR.
EliminarAh, pero es que la noche tiene una atracción especial y unos silencios prolongados de los que suele carecer el día... He sido -y todavía lo soy porque nunca he dejado de estudiar- estudiante noctívago. Eso sí, sin atracones. Porque el problema no es, ni ahora ni antes, estudiar de noche o de día, sino dejarlo todo para el final y enfrentarse a una pila de apuntes y mamotretos que parecen recién editados por falta de uso.
ResponderEliminarLa noche, sí, y sus silencios, pero para otros menesteres, no para estudiar Matemáticas o Derecho Civil. Pero también el día para vivir, no para pasarlo durmiendo. Cuando tengas mi edad sabrás que, en las horas que duermes, pasan muchas cosas que no debes perderte.
EliminarCada edad posee sus ritmos biológicos; sus momentos... Y el día tiene veinticuatro horas que, bien planificadas, permiten trabajar, estudiar, dormir y tener momentos de asueto. Insisto que, en lo tocante a los estudios, no se trata de cuándo se estudia sino cómo se distribuye ese estudio periódicamente.
ResponderEliminarPor supuesto que esta última frase la comparto, como ya he dicho más arriba, pero lo de los ritmos biológicos creo que no depende de la edad, pues se dice que hay personas buho y personas alondra. Yo creo que soy las dos cosas, pues siempre me he acostado tarde y me he levantado temprano, no ahora que soy mayor, sino desde que tengo recuerdo. Relativamente temprano, claro, pues el amanecer no lo he visto más que en hospitales y me trae ese recuerdo.
EliminarComo se ha dicho, en casa hay muchas más distracciones. Además, en la biblioteca (o en algunas) hay salas de trabajo en grupo. En matemáticas, casi todos estudiábamos en una de esas salas, por grupos, e íbamos comentando todo. Los que entendían mejor una materia ayudaban a los que no tanto, etc.
ResponderEliminarYo no salía "a airearme" hasta la 1, pero también debo decir que cuando mejor me concentro es a partir de las 10 de la noche. Por mí, el horario laboral sería justamente el contrario del de ahora jijiji Creo que ser una persona "de día" o "de noche" depende de los ciclos de cada uno más que de las ganas.
¿No será lo que he dicho antes de que se ha impuesto la costumbre de hacerlo todo de noche? Como la diversión, por ejemplo. A las 5 de la mañana no hacéis nada que no hiciéramos nosotros a las 10 de la noche, pero ahora es inconcebible ese horario. ¿Por qué? ¿Todos los nacidos en décadas posteriores tenéis otros ciclos?
EliminarNo lo sé. En mi casa, mi madre siempre se levanta a las 7 con una energía imparable, mientras que mi padre empezaría a vivir a las 10 de la noche, como yo. O incluso peor. De verdad creo que hay tipos de personas, según ciclo natural. Claro que se pueden modificar las costumbres y demás, pero parece como si todos tuviéramos un "ritmo base".
EliminarEso sí, si echaba las cuentas, cuando estaba estudiando a mí me salían más horas de estudio que de sueño.
Esas horas de estudio -sean de día o de noche- quizá son las "culpables" de que estés trabajando cuando tantos jóvenes hay parados.
EliminarHay gente que estudia mejor por la noche porque dependen de su ciclo de actividad. No es mi caso, yo siempre prefería madrugar, acostarme pronto y levantarme a las cuatro o cinco de la mañana, que era cuando me cundía más. Aún hoy rindo mucho más en el trabajo a primeras horas de la mañana que a últimas de la tarde. tengo sin embargo compañeros que llegan a las diez de la mañana y son capaces luego de trabajar hasta las tantas de la noche.
ResponderEliminarEn cuanto a las bibliotecas, no sé cómo será en tu ciudad, pero en Madrid era imposible concentrarse con los trasiegos de la casa. Que si la aspiradora, que si las ventanas abiertas, con el consiguiente ruido de tráfico, que si el teléfono… En la biblioteca se estudia mucho mejor.
Yo creo que no es cuestión de ciclos, sino de costumbres y circunstancias, pues también hay muchas personas que no pueden acostarse temprano porque algo les impide dormir. Yo, por ejemplo, tengo una terraza de bar debajo que cierra a la 1 -1,30, así que dificilmente podría dormir antes de esa hora y tendría que organizar mi estudio de acuerdo con esa circunstancia.
EliminarEs verdad, lo del ruido en España es un mal endémico, pero claro, somos una minoría los que nos quejamos.
EliminarNi siquiera nos quejamos, pues sabemos que es irremediable. Y esto de las terrazas antes al menos era solo en verano, pero ahora con las estufas y esos medios cierres que les ponen, es todo el año.
EliminarLas bibliotecas tienen mucho peligro hormonal, además de libros infestaos de ideas raras... y que
ResponderEliminarla juventud no sabe que hacer con el tiempo de los demás, lo explica tó
Eso es lo que yo veo, que muchas relaciones se inciaron en una biblioteca, así que algo se hará además de estudiar.
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