3/7/19

La sonrisa




      Prácticamente no veo la televisión, solo algún telediario y poco más, pero hoy, en las noticias andaluzas, he visto algo que me ha llegado al alma. 

      Es el habitual vídeo de la llegada de subsaharianos en pateras a nuestras costas. Noche cerrada, foco de la cámara, una larga procesión de personas envueltas en las también habituales mantas rojas y ayudadas por los voluntarios de la Cruz Roja. Muchas mujeres y muchos niños, caras de cansancio, andar vacilante tras horas de travesía. En primer plano, un niño de poco más de un año en brazos de una chica joven de Cruz Roja. Tranquilo, confiado. Lo han separado de su madre, que quizá vaya detrás, pero no tiene miedo. De pronto, vuelve la cara hacia la chica que lo lleva, la mira con unos ojos enormes… y le sonríe con la risa más bonita que he visto en mi vida.

Bienvenido Mamadou, Mor, Abdul… Ojalá no te borremos esa sonrisa.

16 comentarios:

  1. Ojalá sea cierto y no le podamos borrar nunca esa sonrisa.
    Yo no he vivido esta situación pero si que la vivió mi padre al menos de manera similar, el también tuvo que "emigrar" de su pueblo, los de derechas iban a por el. El alcalde fue el que le ayudó, le dijo que los falangistas lo querían fusilar ya que era contrario al régimen, ocurrió durante al inicio de nuestra guerra.
    Se ocultó y empezó a pedir trabajo en los pueblos de alrededor y cuando había "redadas" se iba disparado a otro pueblo, solo sin familia, la había dejado en su terruño, trabajó como pudo y cuando lo contrataban, se recorrió andando muchos pueblos de la Jacetania, estuvo de peón en la instalación del ferrocarril por la montaña de Aragón, terminó en Madrid de empleado de telefónica. Allí no lo pasó bien, pero gracias a Dios sobrevivió.

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    1. Pocas personas se van de su tierra y se separan de su familia si no hay algo -o alguien- que los empuja a emigrar. Puede ser el hambre, como estos subsaharianos, o las persecuciones políticas, pero siempre es tremendamente duro y deberíamos ser más comprensivos y más acogedores.

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  2. Europa -sus gentes-, que ha sido un continente de migrantes a lo largo de toda su historia debería ejercitar,además de la empatía, la memoria inmediata. Porque cuando se pasta en el olvido se termina perdiendo la vergüenza y, lo que es peor, el respeto al prójimo.

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    1. No soy ilusa y se que África no cabe en Europa, pero creo que deberíamos hacer un esfuerzo. Por pura humanidad... y pura justicia. ¿De donde nos hemos sacado que, por el simple hecho de nacer en un país, ya es nuestro?

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    2. Hambrunas, gobiernos corruptos, guerras, colonzación, descolonización, saqueo de recursos naturales, esclavitud, pobreza extrema, abandono... África ha sido el gran parte temático en el que muchos países europeos pusieron sus zarpas dejando un reguero de injusticias que sigue siendo visible en la actualidad.

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    3. Siempre que se toca este tema, me acuerdo de lo que me impactó en la Facultad cuando el profesor de Moral Política y Económica mencionó lo que tú dices y terminó diciendo: África, en este momento, ya no sirve ni para ser explotada. Por eso, ahora lo único que se pretende es que los africanos no se vengan aquí y eso es como poner puertas al mar.

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  3. Gracias por tu visita y aportacion.

    Besos

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  4. África no cabe en Europa, pero es que tampoco es esa la solución. Más nos valdría cambiar la situación de esos países para que no tuvieran que emigrar, pero entonces no habría votos, ni subvenciones, ni ONGs viviendo del cuento, ni mafias, ni violaciones, ni abusos, ni corrupción, ni expolio. Y los que mandan prefieren mantener todo eso porque se enriquecen del dolor ajeno con la connivencia de los más inocentes, que compran los argumentos simplistas sin pensar más allá La verdadera caridad pasa por acabar con lo que menciono y por mejorar sus condiciones de vida en sus países de origen. Entonces, que cada uno vaya y viva donde quiera.

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    1. Por supuesto que el ideal que es que pudieran quedarse en sus países, pero están tan empobrecidos y sus gobiernos tan corruptos, que veo dífícil cambiar desde fuera esas circunstancias. No es solución que vengan, pero esto es como lo de la Madre Teresa, que cuando le decían que la caridad no es solución, sino que hay que cambiar las estructuras, ella contestaba: "De acuerdo, pero, mientras eso llega, si a este niño no le doy un vaso de leche, se me muere"...

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    2. Esos gobiernos miserables y corruptos han sido "alimentados" desde Occidente, en pago por los "servicios prestados" por hacer la vista gorda a tantas arbitrariedades.
      No se trata de traer África a Europa sino de diseñar políticas de compemsación que tengan una proyección a largo plazo para que este presente aciago se transforme un un futuro esperanzador. Pero está claro que en este planeta de riqueza y pobreza, los países poderosos sólo son capaces de aliarse para crear guerras en suelo ajeno. Y, luego, que si hambrunas, campos de refugiados saturados, horror, muerte... Esa es la herencia externa a nuestras cómodas vidas que nos han legado y legaremos a las generaciones que vienen detrás.

      Y, obviamente, quien muere de hambre o sed no puede esperar; la respuesta inmediata es la solidaridad de otros seres humanos capaces de conmoverse y contribuir con las ONGés que intentan paliar el deprimente día a día de quienes ya no tienen ni capacidad de soñar. Hay quien dice: "Pues yo no doy porque lo que se envía no les llega". Por supuesto que no llega todo; hay que pagar el diezmo en las aduanas, las fronteras, los puestos de policía, al líder de la guerrilla Z, al enviado gubernamental, al que apunta con una ametralladora, al que se atribuye la condición de reyezuelo, a los capos de los campamentos... Es el chantaje por salvar algunas vidas, el precio por tener buenos sentimientos, la dádiva obligada para conseguir llevar un mínimo de esperanza a quienes nacen para malvivir.

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    3. Yo creo que eso de que no llega lo que se manda a los países necesitados de ayuda, para algunos es una forma de evadirse, pues si pones interés, hay muchos sistemas de estar seguro de que llega. Y el mejor es confiar en la persona a quien se lo entregas. Sabes donde va, sabes que va a hacer con lo que le das, te cuenta a la vuelta lo que ha hecho… Por ejemplo, ¿sabías que, en ciertos países americanos, pagando la cesárea de una madre con sida, el niño nace sano? Fíjate que diferencia. Y será igual en África, que si no muere de hambre va a morir de sida.

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  5. La política es ese difícil equilibrio en que, ayudar a los países en vías de desarrollo, significa promover su agricultura y su industria... y que en lugar de llegar ellos...lleguen sus hortalizas, sus naranjas... Y eso también crearía discrepancias entre los agricultores o los pescadores de aquí. También los hay que se molestan porque "hay demasiados Abdul, Ali, Mamadou...". Difícil equilibrio, cuando esos te votan (o no) cada cuatro años.
    Aquí hace falta gente, y si llega con una sonrisa, mejor que mejor. Y si ayudamos a un continente que expoliamos durante siglos... pues también estaría bien.

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    1. Si llegan sus hortalizas o sus naranjas, habrá que aguantarse y tratar de competir, pero peor es que lleguen ellos y no podamos darle una acogida decente. De todas formas, desarrollar la agricultura en el país de donde procede el niño de la sonrisa, por la distancia solo serviría para darles de comer a ellos. Que ya es.

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  6. No te visitaba hace tiempo, no hay disculpa porque tus crónicas son siempre certeras y cálidas sea cual sea el tema. Qué tristeza que tenga que emigrar la gente y además desmembrar las familias. La inocencia del niño habrá reconfortado a quien lo portaba más de lo que sentiría él ese confort. Hermosa y triste crónica. Besos

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    1. Han pasado tres meses desde entonces y ahora pienso que ojalá ese niño y su madre hayan encontrado acogida en este país, que no es el paraíso, pero quizá algo mejor que el que dejaron.

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