Me encuentro a un amigo y hablamos de lo que siempre hablamos ahora todos: de la crisis. De cómo los ingresos van bajando, los precios subiendo y el miedo al futuro se nos asienta en el estómago. Me confía a continuación algo que yo ya se, que su mujer no se entera de nada, que con ella no va la crisis y exige el mismo dinero, enfadándose con él si no se lo da. Y pasa a hablarme con un cierto orgullo de que él ha pasado en sus negocios por épocas muy malas, pero su mujer nunca las padeció, nunca supo cómo estaban las cosas, pues él no le negó ningún capricho aunque no supiera si iban a poder comer al mes siguiente.
Y no es este el único amigo al que le he visto esta actitud, pues hace años hubo otro que venía a mi casa a desahogar su angustia por la grave situación por la que estaba pasando, mientras a su mujer la tenía al margen de todo. Y también decía con orgullo que disfrutaba al ver como dormía apaciblemente a su lado mientras él no podía pegar ojo.
Y yo me pregunto: ¿Por qué ciertos hombres mantienen a sus esposas como si fueran niñas? ¿Por qué evitan contra viento y marea que maduren? ¿Es bueno eso en una relación de pareja? ¿Les ocurre solo a los hombres mayores?
Actualización: Diálogo sostenido con la mujer del primer amigo.
Ella: ¿A ti no te gusta la iPad?
Yo: Sí que me gusta.
Ella: ¿Y por qué no te la compras? No tienes nadie que te lo impida.
Yo: Me lo impido yo, que no están las cosas para caprichos.
Ella: ¡Anda ya! No seas roñica….
Lo mismo que le dice a su marido.
Esa es una forma de comportarse, a mi parecer errónea, de algunos hombres y de algunos padres. Ocultar la verdad no le soluciona nada a nadie y si puede dar muchos problemas.
ResponderEliminarDe todas formas esas mujeres esconden la cabeza porque quieren y les es muy cómodo porque imposible que no sepan lo que ocurre cuando el tema flota en el ambiente y no se habla de otra cosa.
Estará en el ambiente, pero siempre piensan que a ellas no les afecta.
EliminarHasta que un día se encuentren con la cruda realidad frente a sus narices y entonces llegarán las lágrimas y los lamentos. Claro que esta clase de gente suele tener suerte y siempre encuentran un cuello en el que colgarse.
EliminarSuelen ser mujeres que pasan de la protección del padre a la del marido y, si este muere, a la de los hijos que, casualmente, heredan el mismo criterio del padre respecto a ella. Yo he presenciado como estando uno de estos amigos internado con algo grave, los hijos se negaron a que su madre fuera al hospital "para que no se impresione".
EliminarEstas son las consecuencias de vivir en la mentira, que en lugar de tirar uncidos la pareja del carro, tira uno y el otro va subido en él. ¡Mal negocio hace quien actúa así!
ResponderEliminarUn abrazo.
Pues son parejas que llevan toda la vida juntos y no parece que les haya ido mal. Eso es lo raro y lo que me llama la atención.
EliminarSin ánimo de ofender a personas a las que ni conozco, son tales para cuales. Ellos y ellas. Ellas viven -o lo aparentan- en la inopia y ellos encantados de sus mujercitas floreros. Buena complementación.
ResponderEliminarPero dejando aparte los casos concretos, quedan en el aire mis preguntas de por qué es tan corriente este tipo de mujeres... y de hombres.
Eliminar...quizás porque la "clásica" asunción de roles permanece intacta en algunas mentes y actitudes. Y quizás en ello resida la "buena vida en común" de esas parejas. Ellas, las señoras de su casa con sobrecito a fin de mes, son como esas esposas perfectas que ponía de ejemplo la Sección Femenina -me compré toda una remesa de libros sobre esos años y todavía no me he repuesto de las sandeces que aconsejaban curas, médicos y demás guardianes de la esencia femenina-.
EliminarImagino que para ellas -y ellos- ya es demasiado tarde para cambiar.
Lo curioso es que mi madre, que pertenecía a una generación anterior a todas estas mujeres, no era así. Siempre quiso estar enterada de los problemas de mi padre en su trabajo, siempre supo de lo que podía disponer y se administró según la época, nunca permitió que mi padre la dejara al margen ni la protegiera excesivamente. Era una mujer distinta quizá porque fue anterior a la Sección Femenina y me blindó a mí contra su influencia, de tal forma que fui la única de las amigas que se escapó de hacer el Servicio Social y de ponerse los "puchos" en el Castillo de la Mota.
EliminarPues a mi me tocó la Sección Femenina y sin embargo no tengo nada que ver con la forma de pensar ni actuar de esas mujeres.
EliminarEstarías también blindada. Yo me fui escaqueando hasta que llegué a la edad en que ya no había que hacer el Servicio Social.
EliminarNo, no, si no afirmo que las mujeres de la época de mangoneo de la S.F. hayan terminado convertidas a los dictados de esa organización, sino que se potenciaban mujeres con esa actitud tontuno-hogareña, que es muy diferente. Los intentos de fajar el cerebro femenino dieron, muchas veces, sus frutos. Y puede que algunas féminas se sintieran/se sientan ·"realizadas" con el rol impuesto.
EliminarYo creo que esta postura es más bien producto de un determinado estatus social, pues la he visto también -aunque en menor medida- en mujeres más jóvenes que no vivieron aquella época.
EliminarEn mi opinión, son ganas de no ver la realidad que conocen, pero que no quieren asumir.
ResponderEliminar¿Quizá porque así viven mejor?
EliminarSeguramente y solamente dejarán de gastar indebidamente cuando ya no haya nada para poder despilfarrar o hasta que su compañero le muestre las cuentas a cero de las cartillas o si me apuras cuando lo vea por las mañanas sin ir a trabajar por haber sido despedido.
EliminarEl problema es que una de ellas es muy religiosa y siempre dice que Dios proveerá, o sea, que el dinero cae del cielo y por eso no hay que preocuparse. Estas mujeres nunca saben lo que gana su marido ni como lo gana y así se explica una luego algunas cosas que salen en la prensa.
EliminarEs que son un clásico las parejas donde se reúnen el orgullo masculino con la comodidad femenina.
ResponderEliminarAparecer como un buen proveedor le aumenta la autoestima a algunos hombres y el ser satisfechas en sus deseos mantiene sumisas a algunas mujeres. (Incluso conozco casos en que la esposa hasta acepta la infidelidad de su marido por conveniencia económica)
Me has recordado a una que decia cuando se hablaba de las juergas de su marido: Con tal de que me de el sobre a primeros de mes.... Yo creo que hay también un deseo por parte del hombre de sentirse superior, protector del débil, y, por tanto, un interés en mantener esa debilidad de su mujer, unido a la comodidad de ella en su papel de débil que le resulta rentable.
EliminarEso es mas despreciable que hacer creer que se ignora la situación económica.
EliminarEs un tipo de relación de pareja que yo nunca entenderé, pero que parece funcionar, pues como he dicho antes, son parejas que llegan a la vejez sin problemas. En uno de los casos que menciono en el post, la mujer recibe el dinero para la compra diariamente como si el marido no se fiara de lo que hace con él. Y quizá tenga razón, pero demuestra una desconfianza que no entiendo que sea compatible con una relación de pareja.
EliminarY qué razón tenía doña Mae West cuando decía aquello de "las chicas buenas van al cielo y las malas a todas partes".
ResponderEliminarEste tipo de chicas buenas no van al cielo, sino al limbo....
EliminarLes ocurre más a los hombres mayores porque al final es una cuestión de educación. Conozco a hombres mayores que no saben ni atrase los zapatos, porque siempre tuvieron a una mujer al lado, y a esposas que nunca se preocuparon de dónde venía el dinero.
ResponderEliminarHoy día, las cosas han cambiado mucho. Los hombres cocinan igual o mejor que las mujeres y éstas se ocupan del dinero igual o mejor que los hombres.
Yo prefiero la segunda opción porque nadie depende de nadie y es libre de elegir.
Es cierto lo que dices de que las cosas han cambiado, pero como digo más arriba, también se da esta postura en algunas mujeres jóvenes que dependen económicamente de sus maridos, sobre todo en las de una posición alta.
EliminarAl menos hoy hay más libertad y si dependen es porque quieren, no porque estén obligadas.
EliminarEn eso tienes razón, pero no deja de ser indignante que el el siglo XXI haya mujeres así.
EliminarPara mi se mezclan varias cosas de las que ya se ha hablado en estos comentarios, y que resumiría en considerarlos a ellos los culpables de la situación, por no tener el valor suficiente para contar la verdad de la situación a sus mujeres.
ResponderEliminarLa posición de ellas es de absoluta comodidad, viven bien y les vale. La de ellos de cobardia. Y la de ambos de absoluto egoismo.
Tales para cuales, como dice Una mirada...
Hoy he leido en prensa un artículo sobre las consecuencias de superproteger a los hijos, de dárselo todo hecho. Pues esto es lo mismo, es "fabricar" una mujer-niña que se porta de forma tan egoista como una niña, a la que le llega el dinero y no sabe de donde... ni le importa.
EliminarYo creo que han visto «El padrino» y dejan a la mujer fuera de los negocios. Pasa exactamente lo mismo en «Full Monty» Pero en cualquier caso es una actitud machista por parte de él, comodona por parte de ella y peligrosa.
ResponderEliminarSi un día no consiguen remontar hay que dar todas las explicaciones, y ella no lo entiende...
A mi no me gustan los iPad. Compré un día un iPod y me pareció un rollo y no voy a comprar nada de Apple.
Hay a quien le sustituye el ordenador y es mucho más cómodo de transportar, pero para mí sería un juguete y no están los tiempos para juegos.
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