25/3/18

La firma






     Hemos dejado atrás (aunque no del todo) la época de las preferentes y demás “productos” que los bancos colocaron a quien se puso a tiro, y de ella hemos sacado un poco de más experiencia y mucha pérdida de tiempo en las gestiones bancarias, ya que se han multiplicado los documentos que tenemos que firmar para cualquier trámite que hagamos.  Que si el contrato de servicios, que si el test de idoneidad, que si otro contrato para operar on line… Contratos y test que se dice que son para más seguridad del cliente, aunque en realidad están cubriendo la espalda al banco. 

     Pero no es de eso de lo que voy a hablar, sino de la firma que estampamos en estos documentos dando nuestra conformidad con lo que aparece escrito en ellos. Y yo me pregunto: ¿De verdad es así? Porque lo que estoy experimentando es que dejo mi firma en una tableta en la que solo aparece el casillero para esa firma y, como mucho, otro para la del director o empleado.  ¿Cómo se, entonces, lo que estoy firmando?  Más de una vez lo he dicho al firmar y he hecho que me impriman el documento con mi firma debajo. Que es lo que deberíamos hacer siempre, pues este sistema, a la larga, va a traer consecuencias similares a aquellas por las que ya hemos pasado estos años atrás.
  

14 comentarios:

  1. Eso de las firmas en blanco nos está ocurriendo constantemente, no solamente en los bancos, también correos nos hace firmar en dos sitios, al menos a mi. En un impreso para justificar que he recogido un certificado o un paquete, sea este a mi nombre o a nombre de un familiar y luego me hace firmar en blanco, con el dedo, por cierto no hay quien pueda ver que esa es mi firma, en un aparatito que lleva atado al cuello. ¿Habré firmado la recepción de esa carta, o me habrán hecho firmar que les debo 50.000 euros por intereses de demora de algo que yo nunca he comprado?

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    1. Hace unos días le he firmado así a Correos al traerme a casa un paquete y ni el grafólogo más experimentado podría reconocer ahí mi firma. Cada día me arrepiento más de no haberme creado en su momento una firma de esas que son un garabato y que ahora sería mucho más fácil de realizar con el dedo.

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  2. Te iba a decir que lo pidieras impreso, pero ya veo que te has adelantado. No solo firmamos en el banco, sino también en multitud de servicios como los relacionados con la tecnología. Nadie se lee las condiciones ya que ellos se encargan de que sean ilegibles o engorrosas. Deberíamos pedir más seguridad legal, pero los que tienen la sartén por el mango, léase el dinero, son ellos.

    En cuanto a los bancos hubo (y hay) de todo. Gente que firmó sin saber y listos que ahora se hacen los tontos para reclamar, pero que bien calladitos que estaban cuando las cosas rentaban un 10%. Como norma general, el del banco nunca es tu amigo, y va a su negocio. Y otra de propina: si lo entendemos es mejor no meterse.

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    1. Hace ya tiempo, tratamos aquí lo de las preferentes y podrás ver que estábamos de acuerdo. Bueno, pues apuesto que dentro de un par de años estaremos hablando de esto de las firmas en los mismos términos.

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    2. Te compro el argumento. Es una apuesta segura.

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    3. Seguro. Estaremos viendo gente en la tele diciendo que el del banco lo engañó, que no sabía lo que firmaba, que no lo vio, que echó un garabato en una pantalla donde no veía ni su firma. ¿Y quien habrá tenido la culpa? Pues todos los que nos prestamos a firmar de esa forma.

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  3. No pensé en ello, generalmente damos por hecho cosas en las que nos tendríamos que parar a pensar más. Aún asi, es raro que firme sin ver el texto ahora agregaré lo que aconsejas. Siempre tan interesante lo que expones. Un abrazo y gracias.

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    1. Ese tipo de firma no está en todos los bancos, pero se va introduciendo y terminaremos firmando así siempre, pues ya le firmamos así hasta al técnico que viene a reparar la lavadora.

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  4. Los bancos son nuestros amigos. Debemos permitir tácitamente que nos sisen, porque así no tendrán que robarnos, ni tendremos que rescatarlos.
    Es palabra de Montoro.

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  5. Es una buena medida esa de pedir que te impriman el documento. Y más teniendo en cuenta la tendencia de determinados establecimientos a engañar a la clientela...

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    1. Y si lo pides antes de firmar y te lo llevas a tu casa para leerlo despacio, mejor que mejor. Yo lo he hecho en varias ocasiones. Como digo en ese post que enlazo, ponemos mucho más cuidado cuando compramos cosas de menos valor en una tienda que cuando compramos un producto bancario.

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    2. Un detalle más a tener en cuenta. A veces a una le da "cosita" hacerlo, pero es muy buena medida. Gracias.

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    3. Pues no nos debe dar "cosita" de nada, ya que ellos van a los suyo y nosotras debemos defender lo nuestro. ¿Que demostramos desconfianza con eso? Se la han ganado...

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