No hace mucho, observé en el supermercado como dos chicas muy jóvenes tomaban de las estanterías sendas botellas de ginebra y vodka mientras hablaban de sus cosas e introducían otros artículos en el carro, dando la sensación de que aquello era algo habitual, acostumbrado, normal. Como el supermercado es serio y bien organizado, supongo que al pasar por caja les pedirían el DNI, pero aun así, aun siendo mayores de edad, ¿qué hacen dos chicas de 18 años consumiendo habitualmente esas bebidas de tantos grados?
He recordado esta anécdota cuando he visto en la prensa que una niña de 13 años ha sufrido un coma etílico estando en clase. Al parecer, había llevado al colegio una botella de agua mineral de medio litro rellena con ginebra y vodka y la había estado consumiendo y ofreciendo a sus compañeras en el recreo.
¿Qué está pasando? ¿Tenemos una juventud alcoholizada? ¿Incluso una adolescencia habituada a consumir alcohol en grandes cantidades? Mucho me temo que los botellones están dando lugar a esto y en pocos años pagaremos las consecuencias tanto socialmente como en la sanidad, que tendrá que soportar una población afectada en su salud por el alcohol injerido.
Es cierto que hay una cultura de la borrachera algo extendida. Es como si se necesitaran emociones cada vez más extremas.
ResponderEliminarDe todos modos, sobre la niña de 13 años, no sé si se habrá confirmado o no, pero unas supuestas compañeras suyas de clase escribieron en un foro que la niña fue obligada a beber en el recreo por el grupo más "líder". O sea, parece ser (o por lo menos hay un rumor) de que es un caso de acoso escolar y no de niña alocada.
Hablando de todo, ¿por qué en ningún medio aparece el nombre del colegio? Según esa misma fuente de información, es un colegio privado, exclusivamente femenino, perteneciente a una selecta orden religiosa.
No conocía esa información o rumor sobre esa niña y tampoco se si el colegio es público o privado, pero tanto lo uno como lo otro no cambia el hecho de que muchos jóvenes y adolescentes están bebiendo más de la cuenta sin pensar en las consecuencias. ¿Las conocen realmente? Me temo que las campañas que se hacen, como la del cartel de arriba son inútiles
EliminarDesgraciadamente un gran número de jóvenes parece que no saben divertirse si no es poniéndose de alcohol hasta las cejas. Puede entenderse que durante el transcurso de una fiesta alguno bebiera algo de más, pero lo que es incomprensible es que salgan de casa ya con la idea de emborracharse hasta caer al suelo y no digamos nada de los nuevos método utilizados para que el alcohol les haga efecto cuanto antes.
ResponderEliminarNo se lo que pasó con esa niña de 13 años porque no había visto la noticia pero a mi entender nada tiene que ver el colegio aunque fuera privado, ni exclusivamente femenino, ni religioso, el problema está en la calle y es cosa de todos los días y los padres de los niños tiene mucho que ver, estoy cansada de escuchar a una amiga enfermera en un centro de salud contar la reacción de los padres de los adolescentes cuando se les llama para comunicarles que sus hijos tienen que ser ingresados con un coma etílico, unos ni se presentan y otros se enfadan porque o bien se les sacó de la cama o se les hizo interrumpir alguna reunión.
Creo que este es un problema grave al que no se le está dando toda la importancia que tiene y si se espera mucho para tomar medidas quizás sea ya demasiado tarde.
Lo que yo no se es que medidas se pueden tomar aparte de estas campañas que no sirven para nada, pues mientras ellos no encuentren otra forma de divertirse no habrá remedio. Todos hemos bebido en las fiestas, pero ese no era el objetivo, sino solo una forma de acompañarla, como podían ser los bocadillos o las patatas fritas.
EliminarLa noticia la conocía, aunque no había leído nada sobre el posible colegio, ni que la obligaran a beber. He buscando información y lo único que he encontrado en Facebook es el siguiente comentario que dice uno de los contertulios : "Si va a un colegio femenino del opus, no me extraña, yo haría lo mismo".
ResponderEliminarIndependientemente de esto que no es fiable, yo suelo pasar muchos días por un centro comercial que me viene a mano a comprar pan y alguna cosa más. Una semana antes de las fiestas del Pilar, chicas por un lado y chicos por otro, con edades muy próximas a los 18 años, llenaban un carro metálico del super hasta los topes con bebidas alcohólicas de elevada graduación. Esto ocurrió todos los días que yo fui a comprar el pan, incluso los días laborales de las fiestas.
Yo lo he visto eso también muchas veces y me gustaría conocer alguna encuesta sobre el porcentaje de bebidas de este tipo que se venden a jóvenes y a adultos.
EliminarEs el beber por beber. El carro de los jóvenes el viernes por la tarde: el mismo número de botellas de alcohol que de refresco, vasos de plástico y un paquete de patatas fritas. Como si comer dos patatas fritas (que es lo que toca en el reparto) fuera a evitar la tremenda borrachera.
ResponderEliminarY yo con una Salamandrita con la edad justa de empezar a salir...
Os compadezco a los padres en este momento y no quisiera estar en vuestro pellejo por nada del mundo. Supongo que tendréis que serviros de la experiencia de otros padres anteriores o de la vuestra, que no la tenéis tan lejos, pues esperar a la de vuestros hijos es un poco peligroso. Yo me pasé con la sangría en el santo de una amiga teniendo 13 o 14 años y aquella noche tuve un cólico que me quitó las ganas de volver a hacerlo para el resto de mi vida, pero ahora parece no importarles, parece como si la vomitera formara parte de la diversión.
EliminarLa drogadicción (que de eso se trata) es un problema que se extiende inexorablemente por el mundo debido a que es un formidable negocio para unos pocos que desprecian todo excepto el dinero. Que el alcohol no sea ilegal no cambia el hecho de que es manera de fugarse de una realidad que condiciona la vida de muchos jóvenes.
ResponderEliminarBasta leer algunas noticias como esta para comprender que poco se hace para encontrarle solución al problema. Es como que nos acostumbramos a todo lo malo y lo dejamos pasar.
Cuando publico posts de estos temas relacionados con los jóvenes, pienso que puedo dar la sensación de que censuro a los jóvenes porque soy mayor, que no los comprendo, que no acepto que el tiempo ha pasado y los jóvenes de ahora no son como éramos nosotros. Incluso habrá quien piense que nosotros éramos de otra forma porque vivíamos en una dictadura que no nos dejaba ni respirar y puede ser que alguna razón tengan, pero también es verdad que los de ahora se han pasado al otro extremo. Lo que no tengo claro es que parte de culpa tienen en esto los jóvenes y que parte corresponde a la sociedad que, como tú dices, los maneja en beneficio de intereses económicos, pues también a nosotros nos manejó la dictadura por otros intereses, pero éramos conscientes, lo supimos y nos enfrentamos a ella. ¿Llegará un día en que planten cara a estas costumbres que los están destruyendo?
Eliminarsossssspecho que eso va con la edá,
ResponderEliminarLa madre naturaleza nos azuza a cometer la locura mas nuevagrande, y cuando nos volvemos los suficientemente juiciosos como para evitar sus trampas, estamos a las puertas de que nos ponga el sello de "elemento ya caducado".
Un saludo
Mucho dura, entonces, la locura nuevagrande. ¿O será que lo que dura mucho es la juventud?
EliminarHay demasiada permisividad con el alcohol y eso es un problema de los padres y de los que permiten que los jóvenes tengan un acceso tan fácil. La calidad es mala, los precios demasiado baratos y las cantidades excesivas. Es una droga, socialmente aceptada, pero una droga y se debería regular su consumo.
ResponderEliminarAdemás afecta mucho más a los jóvenes, a aquellos cuyo cerebro se está formando aún. Mayor motivo para subir la edad mínima de consumo. Otros países se toman esto muy en serio, España. como tantas veces, no.
Eso es cierto, pero pienso que no es suficiente, pues encontrarían alguien de mayor edad que se lo comprara. Mientras ellos no encuentren otra forma de divertirse, me temo que el consumo va a seguir por más normas que establezcan.
EliminarLa "cultura del bebercio desenfrenado" no es de ahora. El borrachuzo es una figura típicamente hispana. La novedad es la denominación -botellón- y que sea una "actividad" unisex.
ResponderEliminarNo solo que sea unisex, sino que sea de jóvenes y adolescentes, pues el borrachuzo, el hombre de taberna, era eso: un hombre. No un niño, con un cerebro y un hígado de niño.
Eliminar