18/2/18

Machado, Trump y una otitis



     Mis padres me contaban que fui una niña muy buena, que no lloraba nunca. Solo, a poco de nacer, cogí una otitis y berreé durante varios días (y noches, que es peor). Ahora, por los mismos días pero muchas décadas después, vuelve la otitis y compadezco a aquella criaturica y aquellos jóvenes recién estrenados como padres. 

     Y como, en estas condiciones, una no da para mucho, me limito a copiar un artículo que he leído hoy en IDEAL y que me ha gustado. Lo firma Alejandro Pedregosa y se titula

MACHADO VS TRUMP

     Me ocurrió el martes pasado. Iba yo paseando mis pensamientos por la calle cuando de pronto me encontré rodeado por un grupo de niños con uniforme escolar. Me estaba echando mano al bolsillo para comprar la papeleta de turno cuando una niña, algo ruborizada, tomó la iniciativa y me tendió un papel enrollado. “Queremos regalarle un poema”, me dijo. Quedé atónito. “Es por San Valentín”, me aclaró. Les agradecí mucho el regalo y les propuse que leyéramos juntos el poema. Hubo revuelo de risas y achuchones, hasta que finalmente nos sentamos en un banco de la Carrera de la Virgen. Supuse que se trataría de un acceso juvenil de romanticismo (y estaba dispuesto a alabarlo fuera cual fuera su calidad), pero para mi asombro los chavales se descolgaron con un delicado poema de Antonio Machado, concretamente aquel que empieza: Soñé que tú me llevabas/ por una blanca vereda… Estuvimos un rato hablando de Machado y les recité algunos poemas que llevaba en la memoria: Era un niño que soñaba/ un caballo de cartón… Cuando nos despedimos todos estábamos de acuerdo en que habíamos compartido algo importante. Algo parecido a una emoción. 
     Ese mismo día, muy lejos de la Carrera de la Virgen (en una ciudad pequeña del estado de Florida), un chaval llamado Nikolas Cruz entró, escopeta en mano, en su antiguo colegio y celebró su particular San Valentín asesinando a diecisiete personas y dejando malheridas a otra decena larga. Sabemos sin género de dudas (mientras los familiares entierran a sus muertos), que no va a ser el último caso y que en los próximos meses más gente va a morir en los colegios americanos por arma de fuego. A lo mejor a usted (como a mí) le parece aterrador que un adolescente de diecinueve años guarde en su casa un arsenal, pero es que ni usted ni yo entendemos de esto un carajo. Lo inteligente, lo adecuado, es precisamente lo contrario, que todos los chavales acudan al instituto con sus propias armas, para así poder defenderse en caso de asalto. Y es que para muchos estadounidenses la libertad se cifra precisamente en la posibilidad de tener un arma de autodefensa que, según te haya sentado el batido o la hamburguesa, se puede convertir en arma de ataque, porque total, también hay algo libérrimo y personalísimo en saltarle los plomos al vecino de enfrente. 
     Dice Trump que la cosa no es para tanto. A lo mejor si el asesino hubiera sido negro sí ponía el grito en el cielo (en su cielo de rubios, lechosos y cristianos, claro está) Los problemas del mundo son complicados, pero la vida por lo general es muy simple. Se trata de darle a los chavales un poema o un arma. Elegir entre Antonio Machado o Trump. A lo mejor  usted y yo lo tenemos claro, pero ¿sabe cual es nuestro problema? Que usted y yo en el mundo que se avecina, empezamos a ser minoría.  
   

23 comentarios:

  1. Creo que el articulista tiene razón cuando dice que es posible que nosotros lo tengamos claro a la hora de elegir que dar a los chavales, un poema o un arma, pero al igual que él pienso que en el mundo que se avecina, que ya tenemos demasiado cerca, los que pensamos así somos minoría. Y es que la violencia que practican los jóvenes cada día es más visible.
    En EEUU, hay quien levanta la voz para limitar el uso de las armas, pero tengo entendido que tienen una asociación, la Asociación Nacional del Rifle, con un gran poder e influencia que no permite que nadie pueda limitar ese uso masivo de las armas.

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    1. Yo tengo la ventaja de que en ese mundo que se avecina no voy a estar mucho tiempo para "disfrutarlo".

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  2. Lo de EEUU con las armas no tiene arreglo, en ocasiones ha habido un intento de eliminarlas o cuando menos de empezar a controlarlas, pero luego llega un nuevo mandatario y echa por tierra todo lo que el anterior había empezado a preparar.
    En el mundo hay cinco países que incluso la policía no porta armas, estos países son Reino Unido, Irlanda, Islandia, Noruega y Nueva Zelanda, además de un puñado de naciones isleñas del Pacífico, los oficiales suelen patrullar desarmados, y esto no hace que los homicidios por armas de fuego se multipliquen.
    "Sería imposible para nosotros hacer nuestro trabajo si no estuviéramos armados", le decía a la BBC el coronel Richie Johnson, de la oficina del sheriff de West Baton Rouge, Luisiana (Estados Unidos).
    Por supuesto es mejor un poema que un arma, que las carga el diablo y se disparan solas.
    Una anécdota, y lo siento por la extensión : Cuando el fallecimiento de Franco y el atentado a Carrero Blanco todas la estaciones de Radio de Telefónica estaban protegidas por militares o Guardia Civil, en la estación de radio de Torrero (Zaragoza), había permanentemente un grupo de once militares que estaban las 24 horas del día. En aquella época yo era uno de los encargados de Equipo de la Estación y nada más que el sargento trató de entrar en la estación portando un arma, le planté cara y le dije, el arma se deja fuera, -ellos patrullaban y estaban en el interior del recinto, pero no dentro del edificio-, me dijo que el arma no la podían abandonar a lo que yo le contesté que en ese caso no iba a entrar nadie, lo hacían de vez en cuando para calentarse o incluso charrar un rato con nosotros. Y conseguí que el arma la dejaban fuera a cargo de alguno de los soldaditos, no intentaron volver a entrar con armas.

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    1. A mí las armas siempre me han dado repelús. En una ocasión, un amigo con permiso de armas me mostró la suya para que la cogiera y yo, instintivamente, me eché hacia atrás y aparté mis manos lo más lejos posible, pues me imaginaba su contacto frío y duro y me daban ganas de salir corriendo.

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  3. No sabes cómo te comprendo y empatizo contigo. Me hallo en idéntica circunstancia: una otitis que me hace ver hasta las constelaciones más lejanas...A ver si nos remite, ¿eh?

    En cuanto a EEUU y las armas, parece que no son capaces de relacionar el fácil acceso a ellas y la proliferación de cruentos incidentes que se han dado en centros educativos. Mucho liberalismo, muchas restricciones legales en tantos asuntos, muchos estados con vigencia de la pena de muerte y siguen muriendo personas jóvenes y mayores a manos del loco de manual de turno que consigue, como si de una piruleta se tratara, cualquier arma. Igualito que en el Oeste peliculero, salvo que estas balas cercenan vidas y sus portadores terminan siendo imitados por otros adeptos a resolver sus desesperanzas y carencias a costa de sembrar el terror y la muerte.

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    1. Una amiga, que emigró con su marido a EEUU hace más 40 años, me hablaba en una ocasión de las dificultades que tenían sus hijos para tomarse una cerveza y que, sin embargo, "pueden entrar en una tienda y comprar un arma".

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    2. Mi otitis ya ha dejado de ver las constelaciones, pero me tiene que no oigo ni mis pasos. A ver si remite, sí.

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  4. Armas las justas, osea ninguna.
    Y para darles a elegir, discrepo con el articulista mejor: "sexo o Machado"

    Kisss y Kisss

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    1. Pues sí, pero sexo y Machado no son contrapuestos...

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    2. Efectiva mente, como van a elegir lo primero, luego satisfechos y descansados, se van a ir a robar a escondidas de manera transgresora a Machado, ya que luego de escoger se lo negamos, justo lo que nos proponíamos como objetivo.

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    3. Eeeesso... Muy bien pensado.

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  5. Niños que regalan poemas....
    todavía hay esperanza.

    A ver si mejora pronto esa otitis, coñe!!

    Besos y abrazos.

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    1. Y un profesor -o profesora- detrás que se lo ha sugerido y que seguirá haciéndolo con otros alumnos. Más esperanza todavía...

      Gracias por tus buenos deseos, que espero se cumplan.

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  6. Con lo bien que había empezado el artículo... Qué manía tenemos de decirles a los demás cómo tienen que vivir. No es que yo sea partidario de las armas, pero sí lo soy de que los estadounidenses decidan cómo quieren vivir. Y de paso, que no se metan con la mía. Lo peligroso no son las armas, sino quién y cómo las utiliza. Quizás deberíamos prohibir entonces los coches, ya que sirven para que gente que conduce bebida y/o drogada mate a otras personas... No es lo mismo vivir en una ciudad europea que en un país enorme en el que habita mucha gente, pero donde puedes tener que enfrentarte tú solo y sin ayuda a quién sabe qué peligros, con la policía a decenas o centenares de kilómetros. ¡Qué fácil es simplificar, ver la paja en el ojo ajeno!

    Ojalá que la otitis ya haya remitido.

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    1. Lamento esta vez no estar de acuerdo contigo, sobre todo en la comparación que haces entre un coche y un arma, ya que el coche está pensado y construido para facilitarnos la vida, mientras el arma lo está para destruirla. Por tanto, si una persona conduce drogada o bebida, está yendo en contra de la función de ese coche, mientras si una persona dispara un arma, está cumpliendo con la misión para la que fue creada.

      Y muchas más cosas se podrían añadir. Hoy viene en ese mismo periódico del artículo, un reportaje sobre los europeos que estudian en universidades americanas y uno de ellos, un francés, dice: “Mis amigos americanos no se creen que nunca haya tenido un arma”. Para muchos de estos chicos, que han convivido con ellas desde niños, ya son algo normal, diríamos que una prolongación de su mano, y si la mano se “dispara” dando una bofetada o un puñetazo en una discusión sin importancia, la prolongación de la mano también se disparará haciendo mucho más daño. Y esto hablando de jóvenes normales, que si damos con uno de esos adolescentes con la mente trastornada, entonces ya sabemos las consecuencias. Seguro que a pedradas o con un cuchillo de cocina no causarían tantas víctimas…

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    2. La otitis ha ido remitiendo, pero sus consecuencias se están resistiendo a abandonarme. Muchas gracias por tu interés.

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    3. Suerte con las consecuencias de la otitis, confío en que deje de resistirse y se rinda incondicionalmente.
      Buen razonamiento el tuyo con lo del coche, lo admito, pero ya digo al principio de mi comentario cuál es mi posición sobre las armas, así que quizás estemos más de acuerdo de lo que parece.

      Lo que me indigna es que siempre salen los mismos a defender las mismas cosas, o en este caso a atacar los EEUU. Si estamos contra las armas y las muertes en general, ¿por qué alzan la voz solo cuando hay una matanza en los EEUU? ¿Parece que no suceda en otros lugares? Creo que no es que estén en contra de la violencia, sino que usan estos acontecimientos para lo que en verdad es su fin: atacar los EEUU a cualquier precio. Libres son de pensar lo que quieran sobre el país norteamericano, pero que vayan de frente y que usen excusas populistas. Que no nos manipulen. Eso es lo que me fastidia.

      Tampoco me gusta esa manía de entrometerse en lo que deciden los demás como país o como sociedad. Nos venden que los estadounidenses están en contra de las armas cuando es evidente que están a favor, igual que nos vendieron que odian a su presidente cuando una gran mayoría le defiende, por muy aberrantes que nos puedan parecer sus decisiones. Intentan manipularnos de forma subrepticia y eso es lo que me molesta. Un norteamericano medio nunca entenderá que un francés coma unas andouillettes y no por eso piden que se prohíban. Las armas forman parte, nos guste o no, de la cultura estadounidense, y son ellos los que tienen que decidir cómo quieren vivir.

      Perdón por haberme extendido, el tema es demasiado largo como para tratarlo aquí, de todas formas.

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    4. Pienso como tu, sólo que no me extiendo en ello por el espacio. Para el oído, probaste con un buen apiterapista? Que estés bien.

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    5. A Tawaki. Pues sigo sin estar de acuerdo, ya que siguiendo ese razonamiento de no entrometerse en lo que deciden los demás como país o como sociedad, habría que aceptar la ablación del clítoris de las niñas con una cuchilla de afeitar o la rudimentaria y cruel forma de circuncidar en algunos países musulmanes.

      En cuanto a las matanzas en los centros de enseñanza, reconoce que se dan más allí que en otros países, por el viejo dicho de que “quien tiene un arma termina por usarla”.

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    6. ¡Ah! Y no tienes que disculparte por la extensión, ya sabes que a mí me gusta que en los comentarios haya “movimiento” y los tuyos siempre son interesantes… aunque discrepe de ellos.

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    7. A Rosa María. Soy poco aficionada a la medicina alternativa y ni siquiera conocía la apiterapia y lo he tenido que buscar en Google, pero de todas formas, muchas gracias por el consejo, lo tendré en cuenta.

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  7. No creo que el color de la piel hubiera cambiado lo expresado por Trump, la sesera no le da para pensamientos más limpios, sus sesos deben ser oscuros. Me extralimito, pero todavía estoy indignada. Por otra parte, me encanta que haya jóvenes que no pierdan su inspiración y valores. Mérito de maestros y familias, que los hay buenos y dedicados.
    Abrazo.

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    1. Lo que hace falta es que esos niños que repartían poemas conserven esa mentalidad cuando crezcan y salgan de la influencia de esos maestros.

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